30-12-2020
Un Paso para Delante dos para Atrás Uno de los últimos dictámenes de la ESA contempla utilizar los motores a los que hace referencia el vidéo anterior para los nuevos modelos Ariane 6 y Vega-C que ya se encuentran en fabricación, y que incluso cuentan con conograma anual de entrega. Se contempla utilizar los motores Vulcain en otros niveles de separación pero no en el primero, el cual será abastecido por combustible sólido. Buscando en internet, se nota el recelo por esconder la composición de los distintos combustibles, luego de revisar presentaciones y los sitios de las compañías responsables de su fabricación tengo algunas certezas al respecto, la mayoría de los combustibles sólidos utilizan grandes caótidades de amónio a lo cual se adiciona aluminio para aumentar su poder. La lista de componentes químicos es enorme y ninguna parece ser amigable con el ambiente. Se elabora en granos donde parte de su eficiencia deriva de la forma del grano, junto con la composición, claro está. Los reportes de ESA indican que se realizan muestras de control luego de cada lanzamiento y que estos son llevados a un laboratorio en Europa llamado Pasteur[1], en 5 años que llevó inmerso en esta industria, nunca he visto un documental, nota periodistica, reporte oficial, ni ningún documento asociado a lo que se presenta como un impacto menor el medioambiente, luego de quemar 42 toneladas de un combustible altamente tóxico, es algo que vale la pena revisar. Una de las empresas principalemente responsables es el grupo Safran[2] quienes son participes de Europropulsion una empresa dedicada a elaborar combustible sólido. Existe tanta desinformación que para las pruebas y elaboración se derivó a Regulus S.A. una fábrica de la cual no se sabe nada, ubicada en la Guyana Francesa, sus instalaciones, los procesos de fabricación, y manejo ambiental son en parte una de las principales razones de la desconfianza en la subcontratación consecutiva de este insumo clave para los "nuevos" cohetes européos.
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